1. Buena conductividad térmica y calentamiento uniforme
La conductividad térmica del aluminio es tan alta como 205 w/(m · k), excediendo con creces la del acero inoxidable y la silicona. Placas de calentamiento de aluminio puede transferir rápidamente el calor y lograr una distribución uniforme de la temperatura de la superficie, y la diferencia de temperatura se puede controlar dentro de ± 3 ℃. Esta característica es adecuada para escenas que requieren un control de temperatura preciso, como el moldeo de plástico y el procesamiento de alimentos. La baja capacidad de calor del aluminio hace que su velocidad de calentamiento sea más rápida.
2. Ligeros y alta fuerza
La densidad de la aleación de aluminio es de solo 2.7 g/cm³, que es 1/3 de la del acero inoxidable. A través de la aleación, puede lograr una resistencia a la tracción de ≥275 MPa, cumpliendo con los requisitos duales de liviano y resistencia en la fabricación aeroespacial, de automóviles y otros campos. El peso de las placas de calentamiento de aluminio con la misma potencia es 60% menor que el de las placas de calentamiento de acero inoxidable, y la resistencia al impacto es mejor que la de las placas de calentamiento de silicona. Las placas de calentamiento de aluminio se pueden hacer en formas complejas mediante fundición a troquel o mecanizado, que son adecuados para troqueles de máquina de moldeo por inyección, calefacción de tuberías y otras escenas.
3. Resistencia a la corrosión y adaptación multiCenario
La película de óxido denso (al₂o₃) formada en la superficie de aluminio puede resistir la corrosión ácido, álcali y pulverización de sal, y su vida útil puede alcanzar más de 10 años en ambientes químicos y marinos, mientras que el acero inoxidable ordinario es propenso a la corrosión en entornos que contienen cloro. La temperatura de trabajo de la placa de calentamiento de aluminio fundido puede alcanzar 450 ℃, y aún mantiene la estabilidad de la forma a altas temperaturas; mientras que la placa de calentamiento de silicona solo es resistente a 200 ℃ y es propensa al envejecimiento y el agrietamiento después del uso a largo plazo.